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Papeles del Psicólogo es una revista científico-profesional, cuyo objetivo es publicar revisiones, meta-análisis, soluciones, descubrimientos, guías, experiencias y métodos de utilidad para abordar problemas y cuestiones que surgen en la práctica profesional de cualquier área de la Psicología. Se ofrece también como foro para contrastar opiniones y fomentar el debate sobre enfoques o cuestiones que suscitan controversia.

PAPELES DEL PSICÓLOGO
  • Director: Serafín Lemos Giráldez
  • Última difusión: Enero 2024
  • Periodicidad: Enero - Mayo - Septiembre
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Papeles del Psicólogo, 1996. Vol. (66).




ENTREVISTA A JUAN IGNACIO ARAGONÉS

Juan Carlos Duro Martínez

Profesor Titular del departamento de Psicología Social de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid.

Juan Ignacio Aragonés es Profesor Titular del departamento de Psicología Social de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid.

Desde hace años, a raíz de una invitación a pronunciar una conferencia en la Universidad de Chile y su posterior participación como docente en el Master de Psicología de la Salud y del Bienestar Social impartido por profesores de las universidades madrileñas en la Universidad Centroamericana de Managua (Ver Papeles del Psicólogo 56, págs. 70-71. 1993), se interesa por la Psicología en el contexto hispanoamericano. Este progresivo interés llevó a una mayor implicación científica y organizativa en diversos países del Centro y Sur de América siendo en la actualidad el Representante en España de la Sociedad Interamericana de Psicología.

Juan Carlos Duro. ¿Cómo fue generándose tu interés por el mundo latinoamericano en general y la Sociedad Interamericana de Psicología en particular?.

Juan Ignacio Aragonés. A partir de una invitación que me hicieron para que participarse en un simposium de uno de los congresos que organiza la Sociedad Interamericana de Psicología (SIP), empecé a contactar con psicólogos de Chile y Venezuela. Allí tomé contacto con Emilio Moyano, profesor de la Universidad de Santiago de Chile, con el que en la actualidad desarrollo un proyecto sobre percepción del riesgo financiado por el Programa de Cooperación Iberoamericana desde 1994.

Después de estos contactos preliminares he mantenido relaciones profesionales con Euclides Sánchez, actual presidente de la SIP y con Esther Wiesenfeld, interesada como yo en temas de Psicología Ambiental, que fructificaron con participaciones conjuntas en otros encuentros. Con Euclides en la organización conjunta de un Simposium en el congreso de la SIP en Puerto Rico en 1995 y con Esther en un simposium en Madrid en el Congreso Internacional de Psicología Aplicada. Además ambos fueron al Congreso de Psicología Ambiental celebrado en Canarias en 1995. Desde hace un año soy el representante de la SIP en España.

J.D.C. ¿Cuál es el interés de la Psicología latinoamericana para los psicólogos españoles?

J.I.A. Los psicólogos latinoamericanos conocen en buena medida nuestras producciones escritas. Uno se puede sorprender al llegar a algunos lugares, universidades sobre todo, y encontrar que han leído alguno de nuestros trabajos. Esto que en España, entre colegas, ocurre más raramente, te gratifica y te anima a entrar en contacto con profesores y alumnos de postgrado que tienen tus mismas preocupaciones e intereses.

Este es un dato indicativo de que, en general, la Psicología española es conocida, al menos en ámbitos académicos.

Por otro lado, y, desde una posición positivista, me doy cuenta de las deficiencias que existen en el mundo de la investigación básica, en buena medida debido al interés prioritario por la intervención ante la gran magnitud de los problemas sociales que les abruman.Es chocante desde el punto de vista universitario español, más de despacho, el enorme interés que muestran los colegas latinoamericanos por la intervención y los problemas sociales.

Desde mi punto de vista tanta preocupación por las cuestiones de la realidad social que les rodea hace que haya menos dedicación a la actividad, llamémosle, científica. En muchos casos más que psicología hay buenas intenciones porque, ante la magnitud de los problemas económicos y sociales, poco se puede hacer desde nuestra disciplina.

Pero también es apasionante ese mundo porque hay muy buenos científicos, como por ejemplo el potente grupo de Psicología Social de la Universidad Central de Venezuela.

Desde Latinoamérica se ve otra perspectiva de la Psicología. Es muy sugerente discutir con excelentes científicos que hablan el mismo idioma y que están interesados en la intervención, en los problemas sociales. No obstante, a mi juicio, se da una visión excesivamente comunitaria, intervencionista.

Otra razón de interés, para mi, es que el mundo científico latinoamericano es una vía de entrada a la Psicología Norteamericana. Es curioso, pero la Psicología Norteamericana está interesada en dar a conocer la Psicología del Sur y Centro de América, y a su vez, Estados Unidos necesita el mercado latinoamericano. Por ejemplo, desde EEUU se ha editado un monográfico sobre la Psicología Ambiental latinoamericana y se incluyó en el "Handbook" de 1987 un capítulo sobre el mismo tema.

Otra ventaja indudable es la lengua y la facilidad para comunicarnos frente a las indudables dificultades que, en esos aspectos, sufrimos con el mundo "anglosajón".

J.C.D. ¿Qué posibilidades de cooperación ves entre psicólogos españoles y latinoamericanos?

J.I.A. Una de las posibilidades son los Proyectos Alfa. Se trata de generar una red entre países europeos y latinoamericanos en torno a un tema de investigación o docente. Estos proyectos creo que son la oportunidad que tienen los investigadores latinoamericanos de encontrarse con el mundo europeo, en muchos casos, reencontrarse, ya que muchos de ellos han estudiado en Europa. Además estos proyectos pueden tener efectos de "bola de nieve" al ir engrosando las relaciones entre los grupos de trabajo. Por ejemplo, el Alfa que coordino está formado por cinco países: Venezuela, Holanda, Reino Unido, Chile y España, y su origen se debe al proyecto conjunto que tenemos los dos últimos.

A través de Amalio Blanco sé que durante tres años la EOI ha estado trabajando en un proyecto de innovación curricular para las universidades de América Latina en la que ha estado presente la Psicología. Este intento de conseguir un currículum de mínimos puede ser un buen punto de encuentro para intercambiar temas relacionados con la formación.

Un peligro que veo es que con el fomento de estas relaciones creamos que somos más internacionales, y eso no nos hace internacionales; nos hace "colonizadores del tercer mundo", nos da ánimo para seguir trabajando, pero el mundo de la psicología está en EEUU; los latinoamericanos también los saben. Ellos están buscando también ese mundo sajón.

J.C.D. ¿Qué temas y aspectos preocupan prioritariamente a Latinoamérica?

J.I.A. Fundamentalmente la intervención, como ya he dicho antes. Allí tienen importancia la personalidad, la psicología social y las bases epistemológicas. Desde luego hay una interesante discusión sobre cuál sería la epistemología adecuada para el mundo latinoamericano. Este debate está permanentemente allí junto a otro, que a mí me impacta. Me refiero a los estudios sobre identidad latinoamericana. Probablemente esto se debe "a tener en frente" a EEUU; podría explicarse en términos de una relación "amor-odio", una especie de "querer conquistar a los conquistadores".

J.C.D. ¿ Y respecto a los paradigmas teóricos?

J.I.A. Partiendo que son más intervencionistas que nosotros, creo que son más fenomenológicos. El construccionismo es frecuente en numerosos grupos que trabajan en psicología social.

Si se exceptúa el grupo construccionista "militante"; en general, los investigadores tratan de ser positivistas porque ellos (y más si publican) tratan de conquistar el mundo norteamericano. Inclusive aunque se coloquen en posturas dialécticas, como Ignacio Martín-Baró, psicólogo asesinado en El Salvador en 1991, los métodos y técnicas que utilizan son de carácter positivista.

Otro aspecto distinto es la filosofía de aproximación a los problemas sociales. Desde el punto de vista del método la influencia del positivismo es tremenda, aunque hay autores heterodoxos a la norma dominante que siguen a Gergen y Billig. No obstante, esta corriente da pie a un continuo debate de cómo hacer psicología social.

J.C.D. ¿Cuál es tu opinión sobre el congreso de la SIP?

J.I.A. El Congreso convocará a muchos psicólogos con comunicaciones muy desiguales en cuanto a su calidad científica, por lo que el debate a veces, desde el punto de vista académico puede no alcanzar el nivel que a algunos nos gustaría. No obstante, esa carencia queda compensada con creces con el intercambio profesional y el contacto personal que en esos foros se produce.

Para los psicólogos profesionales tiene más interés porque el 80% de las comunicaciones son sobre la práctica, sobre la intervención en los distintos campos de aplicación.

Una vez publicada la revista, el texto integro de todos los artículos se encuentra disponible en
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