PAPELES DEL PSICÓLOGO Vol. 43-1 Enero - Abril 2022

que las causas (Fonseca-Pedrero, 2021a, 2021b). Por ello, se nece- sitan modelos alternativos que recojan la naturaleza dinámica y con- textual del comportamiento humano, en la vida real y cotidiana, considerando al individuo concreto (Borsboom, 2017; Fonseca-Pe- drero, 2018; Myin-Germeys et al., 2016; Pérez-Álvarez, 2018, 2020, Pérez-Álvarez y García-Montes, 2018; Trull y Ebner-Priemer, 2020, van Os et al., 2013). Estos nuevos planteamientos conceptua- les exigen también un cambio de metodología evaluativa, que vaya más allá de las evaluaciones tradicionales, y que recibe el nombre genérico de evaluación ambulatoria (EA). La idea de la EA no es nueva conceptualmente, pero ha recibido un gran impulso con el de- sarrollo de nuevas tecnologías como los smartphone, los dispositivos móviles y las aplicaciones de diverso tipo ( apps ), que facilitan la eva- luación a distancia en contextos naturales. El uso de esta tecnología está permitiendo nuevas formas de evaluación e intervención de los fenómenos psicológicos, potenciando la incorporación de modelos, herramientas y procedimientos que permitan implementar enfoques psicológicos contextuales, dinámicos, idiográficos, adaptativos, feno- menológicos, funcionales y multicausales. En el presente trabajo se pretende hacer una introducción com- prensiva de la EA. En primer lugar, se realiza una delimitación con- ceptual y se comentan las cuestiones que viene a solucionar y los posibles beneficios. En segundo lugar, se exponen aspectos relacio- nados con la metodología, como los diseños, los tipos de datos y un protocolo general de evaluación. En tercer lugar, se comentan algu- nas de las principales limitaciones, luego se explican algunas aplica- ciones al campo de la Psicología, y se introduce una reciente plataforma desarrollada para su uso en el contexto español. A conti- nuación, se ofrecen algunas recomendaciones prácticas sobre cómo implementar este tipo de metodología, y se finaliza con un apartado de recapitulación, donde se analizan algunos retos y perspectivas futuras. No se pretende en este breve trabajo llevar a cabo una ex- posición exhaustiva, remitiendo para ello al lector a trabajos más es- pecializados (Carpenter et al., 2016; De Moor et al., 2009; Hektner et al., 2007; Hirschtritt y Insel, 2018; Mehl, 2012; Myin-Germeys et al., 2018; Myin-Germeys y Kuppens, 2021; Russell y Gajos, 2020; Stone y Shiffman, 1994; Torous et al., 2021; Trull y Ebner-Priemer, 2013, 2020). DELIMITACIÓN CONCEPTUAL Se puede concebir la EA como un procedimiento sistemático y es- tructurado de observación del comportamiento (afectos, cognición, experiencias, procesos, estados mentales, etc.) de una persona en el contexto natural y real, mediante un dispositivo, generalmente elec- trónico, como PDA, smartphone , etc. La EA abarca una amplia gama de métodos de evaluación que tratan de estudiar las experiencias de las personas en su entorno natural, en su vida diaria. Según Trull y Ebner (2013) se utiliza el término EA para representar un paraguas conceptual y metodológico que incluye el método de muestreo de experiencias ( Experience Sampling Methodology , ESM) (Csikszent- mihalyi y Larson, 1987), la evaluación ecológica momentánea ( Eco- logical Momentary Assessment, EMA), o simplemente evaluación momentánea (Stone y Shiffman, 1994), y los registros psicofisiológi- cos, biológicos y de comportamiento. Históricamente, la ESM se ha relacionado con el uso de diarios de papel y lápiz, la EMA se imple- menta generalmente mediante diarios electrónicos o teléfonos móvi- les, y los registros psicofisiológicos se obtienen usando sensores o actígrafos. Algunos autores procedentes del área de la salud mental han denominado este campo como fenotipo digital (Insel, 2017; To- rous et al., 2017). De forma sintética, puede decirse que la EA se caracteriza básica- mente por: a) Constituir un enfoque idiográfico que permite el examen de múlti- ples procesos individuales (p. ej., emocionales, conductuales, psi- cofisiológicos, estados mentales). b) Recoger información de la persona en entornos del mundo real, en la vida cotidiana de las personas, en su hábitat natural. c) Evaluar los comportamientos (estados, experiencias, procesos psi- cológicos, etc.) actuales (o muy recientes) o en el tiempo real (en el momento en el que ocurren, de momento a momento) de los in- dividuos. d) Recoger información mediante evaluaciones múltiples (de forma intensiva) de cada individuo en el tiempo (típicamente varias ve- ces al día, varias veces a la semana). Como ya se ha señalado, la EA trata de dar respuesta a ciertas li- mitaciones de la evaluación psicológica clásica, incorporando la na- turaleza ideográfica del comportamiento, el contexto cotidiano donde ocurre la conducta de las personas, la naturaleza contextual del comportamiento (ambiente físico, ambiente social, cultura), y la naturaleza dinámica y los mecanismos etiológicos del comporta- miento humano. Por lo tanto, la EA pretende evaluar: a) A las personas teniendo en cuenta sus circunstancias biográficas y contextuales, se trata de un enfoque personalizado. b) A la persona en relación e interdependencia con el contexto de su vida cotidiana conforme ocurren sus comportamientos en el fluir diario. La posibilidad de evaluar factores relevantes del con- texto donde acontecen los fenómenos psicológicos de interés, así como las respuestas de la persona a los mismos son de sumo inte- rés. Se entiende que, para explicar la conducta o las experien- cias de las personas, es necesario analizarlas en interacción con el contexto. c) El comportamiento de las personas en toda su amplitud, comple- mentando los autoinformes con heteroinformes y registros psicofi- siológicos, biológicos y de comportamiento. Y no solo desde una perspectiva cuantitativa, sino también cualitativa o mixta (p. ej., ti- po de pensamientos, forma y contenido de las alucinaciones o delirios, naturaleza y gravedad de la ideación suicida). d) La evolución y dinámicas de cambio de la conducta en el transcurso del tiempo. Se trata de captar la variabilidad temporal mediante la valoración momentánea de las fluctuaciones de momento a momen- to de los comportamientos (estados mentales, experiencias, etc.), es- to es, los cambios y la evolución a nivel micro. Se trata, en suma, de una evaluación de carácter intensivo y micro- longitudinal que a) minimice el sesgo asociado a la evaluación re- trospectiva clásica, b) permita analizar los patrones personales de variación (intra, inter, y contextuales) y comprender cómo se desa- rrollan y despliegan (o no) en el transcurso del tiempo, c) mejore as- pectos relacionados con la precisión (fiabilidad) y validez de las puntuaciones, y d) permita analizar los posibles mecanismos de tipo LA HORA DE LA EVALUACIÓN AMBULATORIA 22 S e c c i ó n M o n o g r á f i c a

RkJQdWJsaXNoZXIy NDY3NTY=