Papeles del Psicólogo es una revista científico-profesional, cuyo objetivo es publicar revisiones, meta-análisis, soluciones, descubrimientos, guías, experiencias y métodos de utilidad para abordar problemas y cuestiones que surgen en la práctica profesional de cualquier área de la Psicología. Se ofrece también como foro para contrastar opiniones y fomentar el debate sobre enfoques o cuestiones que suscitan controversia.
Papeles del Psicólogo, 1998. Vol. (69).
José Antonio Portellano Pérez
Profesor Titular del Departamento de Psicobiología. Facultad de Psicología. Universidad Complutense
El Departamento de Psicobiología de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense está desarrollando un proyecto de investigación para conocer el efecto de la estimulación verbal en el proceso de reanimación de pacientes que sufren parada cardio-respiratoria (PCR). La investigación está dirigida por el Profesor José Antonio Portellano Pérez y desarrollada por Amador Muñoz Prieto, psicólogo clínico. Colaboran en el estudio ocho UVI móviles del 061 que prestan sus servicios en el área urbana de Madrid, perteneciente al Servicio Especial de Urgencia del Instituto Nacional de la Salud.
El objetivo de la investigación es conocer si la estimulación verbal durante el período de reanimación de una PCR mejora los porcentajes de supervivencia de los pacientes y el tiempo de PCR. Se utiliza un Protocolo de Intervención Psicológica (PIP) en pacientes con cardiopatía isquémica que demandan la asistencia de urgencia a las UVI móviles del 061 en Madrid. Todos los casos se atienden siguiendo el protocolo de intervención médica habitual. Para comparar los efectos de la estimulación verbal en pacientes con cardiopatía isquémica se han utilizado dos grupos:
- Grupo Experimental, formado por los pacientes con PCR que reciben asistencia médica y estimulación verbal simultáneamente. Se incluyen dentro de este grupo los sujetos que son atendidos en días pares por el Servicio Especial de Urgencias del 061.
- Grupo Control formado por los pacientes con PCR que reciben asistencia médica pero que no reciben el protocolo de estimulación verbal. Se incluyen los sujetos atendidos los días impares de cada mes.
Todos los pacientes incluidos en el estudio presentan cardiopatía isquémica extrahospitalaria, excluyéndose cualquier otro tipo de cardiopatía aguda asociada a traumatismo o a intoxicación, siendo el rango de edad estudiado entre los 30 y los 60 años. El encargado de aplicar el protocolo verbal es el médico de cada equipo, como principal responsable de las maniobras asistenciales realizadas por la UVI. Todos los miembros de cada equipo asistencial reciben entrenamiento psicológico previo mediante el uso de técnicas de role playing. Las variables dependientes (VD) utilizadas en el estudio son tres:
a) porcentaje de supervivencia en pacientes con PCR, estimulados y no estimulados, antes de su ingreso hospitalario.
b) Tiempo de PCR (no presenciada) desde que comienza la reanimación al paciente (estimulado y no estimulado), hasta su revisión.
c) Tiempo de PCR (presenciada) desde que comenzó la reanimación al paciente (estimulado y no estimulado), hasta su revisión.
Aunque se asume que se producen daños cerebrales irreversibles cinco minutos después de haberse producido una isquemia global algunos autores consideran que el tejido cerebral isquémico puede recuperar funciones aparentemente perdidas con anterioridad, cuando se restablece la circulación sanguínea mediante desbloqueo de los vasos.
Los estudios sobre las consecuencias que tiene la PCR en el cerebro informan que el deterioro del tejido nervioso no es homogéneo, ya que determinadas áreas corticales y subcorticales (lóbulo occipital y ganglios basales), son las primeras en verse afectadas tras producirse una PCR. Sin embargo, las restantes áreas de la corteza cerebral pueden permanecer indemnes, de tal modo que el sujeto, dentro de su estado de aparente inconsciencia, puede seguir procesando la información que recibe auditivamente, aun cuando posteriormente no sea capaz de recordar los estímulos que ha escuchado. Estas afirmaciones se corroboran en pacientes que recibieron anestesia o que sobrevivieron a un cuadro de coma.
Hay que entender que una PCR siempre viene precedida en el sujeto por sentimientos de miedo, indefensión o incertidumbre, ya que no sabe lo que le pasa ni lo que debe hacer, por lo que fácilmente pueden producirse distorsiones cognitivas que pueden sintetizarse en el sentimiento de temor a la muerte inminente. La utilización de estímulos verbales positivos puede mejorar las expectativas del cuadro, potenciando los mecanismos de autoayuda en el paciente que sufre PCR.
Los resultados que ofrece la investigación hasta el momento ponen de manifiesto la mayor eficacia de la estimulación verbal. Se estima que logra sobrevivir una tercera parte de las personas que han presentado PCR cuando se realizan las prácticas asistenciales con UVI móviles. El grupo de pacientes que recibieron estimulación verbal en nuestro estudio tiene una tasa de supervivencia significativamente mayor que el grupo de control, incluso entre los pacientes que finalmente fallecen. Aunque el estudio no ha finalizado en su totalidad, los resultados son claramente optimistas acerca de la importancia que tiene la intervención psicológica en cuadros que tradicionalmente eran de exclusiva competencia médica. Si nuestras hipótesis se confirman, como parecen decantar los resultados hasta ahora obtenidos, habría que plantearse la necesidad de aplicar programas de intervención psicológica en cuadros que cursan con pérdida de conciencia, dentro de ámbito de la medicina conductual.